viernes, 29 de marzo de 2013

RECREAR ...


    UNA FORMA DE LEER Y ESCRIBIR SIGNIFICATIVAMENTE:

ADAPTACIÓN DEL CUENTOTWICE-TOLD TALE DE Enrique Anderson Imbert

    En una noche muy  fría, después de un cansado día de trabajo llegue a mi casa, dejé mi maletín, me tiré al sofá y sin darme cuenta me quedé dormida. Me instalé en un profundo y oscuro sueño en donde soñé que…
    Perseguida por la banda de terroristas corrí y corrí por las calles de esa ciudad extraña.
    Eran casi las doce de la noche. Ya sin aliento me metí en una casa abandonada.        Cuando mis ojos acostumbrados a la oscuridad vi, en el rincón, a un muchacho muy asustado.
    -¿A usted también lo persiguen?
    - Sí – dijo el muchacho.
    - Venga. Están cerca. Vamos a escondernos. En esta maldita casa tiene que haber un desván…
     Ambos avanzamos subimos unas escaleras y entramos en un altillo.
     -Espeluznante ¿No?- murmuró el muchacho, y con el pie empujó la puerta. 
      El cerrojo, al cerrarse hizo un clic exacto, limpio y vibrante.




   -¡Ay, no debido cerrarla! Ábrala otra vez. ¿Cómo vamos a oírlos, si vienen? 
  El muchacho no se movió. Entonces, quise abrir la puerta, pero no tenía picaporte. El cierre, por dentro, era hermético.
  -¡Dios mío! Nos hemos quedado encerrados.
  -¿No?- no dijo el muchacho- Los dos no; solamente uno. 
  Y yo vi como el muchacho atravesaba la pared y desaparecía.
  Aún sigo esperando...


AUTORA: Luciana Monzón.        CURSO: 1 ro 1ra